Desvelar: Descubrir, poner de manifiesto // Quitar, impedir el sueño, no dejar dormir // Dicho de una persona: Poner gran cuidado y atención en lo que tiene a su cargo o desea hacer o conseguir. (Según RAE)

Un trayecto poético y visual de Agustín Calvo Galán

Las imágenes y videos y todos los textos: autoría de A.C.G. puedes usarlos, siempre y cuando menciones la procedencia y autoría. Gracias.

lunes, 10 de julio de 2023

"Los veranos que fuimos" de Santiago Molina Martín


Aceptar en cada momento lo que somos no es un acto de renuncia sino de afirmación. Además, el pasado, lo que fuimos, forma una parte determinante del aquí y ahora, aunque no siempre es fácil comprenderlo. Así, la poesía nos puede ayudar a reconciliarnos con nosotros mismos y también a recuperar lo que fuimos. El poeta granadino Santiago Molina Martín, en su último libro, titulado "Los veranos que fuimos" (Editorial Nazarí, 2023), recuerda y escribe no solo para no olvidar sino para saber de sí mismo en la actualidad, elaborando un camino poético-sentimental en el que todos nos podemos sentir interpelados porque alguna vez hemos transitado por veranos similares, donde la infancia, pero también la familia en su conjunto, con sus medias verdades, sus promesas incumplidas, miedos, arrepentimientos, y momentos de felicidad ha formado parte de nuestros recuerdos. Santiago Molina saber escribir una poesía sin distancias, que conecta al instante con los demás, con los lectores. Así, cualquier puede sentirse reflejado en una niña que se pone de puntillas para parecer mayor: 

"Mi hermana se ponía de puntillas:/ trampas al tiempo".

(Pág. 26)

Porque la inocencia de una primera felicidad nos recuerda que aceptarnos tal y como somos es también aprender a perdonarnos y perdonar a todos los que nos rodean:

"Amar lo equivocado y más, / lo que duele y fractura, / los que nos rompe adentro"

(Pág. 44)

Al fin, el poeta atraviesa toda la vida bajo una sombra ineludible y común: la muerte. En ese transcurrir, tal vez gracias a las convenciones de la escritura, entiende que los momentos de mayor dicha siempre van acompañados por un anticlímax y una despedida. Leer a Santiago Molina es profundizar en la intimidad y la ternura de los instantes felices tanto como de los amargos, pero sobre todo es degustar una poesía bien destilada, sin artificialidades ni vanidad.